El propóleo es uno de los productos más valiosos y menos comprendidos de la apicultura.
Para muchos consumidores es solo “una gotita amarga que ayuda con la garganta”, pero para nosotros, quienes trabajamos día a día en la colmena, el propóleo es un verdadero escudo biológico que protege a las abejas, mantiene la higiene interna y asegura el bienestar de toda la colonia.
En Mishkihue producimos propóleo con prácticas responsables y procesos cuidados, manteniendo su pureza y respetando su origen natural. En esta guía, te contamos qué es, cómo lo producen las abejas, por qué tiene tantas propiedades y cómo lo transformamos en productos útiles para las personas.
¿Qué es realmente el propóleo y por qué es tan importante para las abejas?
El propóleo es una sustancia resinosa que las abejas recolectan de árboles, cortezas y brotes. Lo mezclan con cera, enzimas y pequeñas partículas de polen para producir una pasta con una función muy clara: proteger la colmena.
Sin propóleo, la colmena sería más vulnerable a:
- Microorganismos, hongos y bacterias
- Humedad excesiva
- Corrientes de aire
- Contaminantes externos
- Parásitos o restos orgánicos que puedan descomponerse dentro del nido
Las abejas lo utilizan para sellar grietas, reforzar paredes y “momificar” cualquier elemento que no puedan retirar. Es, literalmente, el sistema de desinfección natural de la colmena.
Por qué el propóleo tiene tantos beneficios para las personas
La potencia del propóleo se debe a su composición rica en flavonoides, antioxidantes y compuestos bioactivos. Esto explica por qué es uno de los productos apícolas con mayor respaldo científico.
Entre sus propiedades destacan:
- Antibacteriano natural: Ayuda a inhibir bacterias comunes en boca, garganta y piel.
- Antiviral y antifúngico: Útil para reforzar defensas y apoyar el bienestar en invierno.
- Antiinflamatorio: Ayuda en irritaciones locales, encías sensibles o molestias respiratorias.
- Cicatrizante y regenerador de tejidos: Aplicado de manera tópica, contribuye a la recuperación de pequeñas heridas, picaduras o irritaciones.
- Antioxidante: Ayuda a combatir el estrés oxidativo y proteger tejidos frente a factores externos.
Su espectro de beneficios lo convierte en un aliado para familias, estudiantes, trabajadores rurales y personas que buscan alternativas naturales.
¿Cómo lo producen las abejas? La parte más fascinante
La producción de propóleo es una de las tareas más minuciosas de la colonia:
- Las abejas recolectoras buscan resinas en árboles como álamos, boldos, pinos o eucaliptos.
- Con sus mandíbulas, desprenden pequeñas porciones y las guardan en sus patas traseras.
- Regresan a la colmena con estas cargas resinosas.
- Las abejas obreras dentro del nido mezclan la resina con cera y enzimas.
- Finalmente, aplican el propóleo en zonas estratégicas: entradas, bordes, marcos y rincones del nido de cría.
Es un proceso lento, detallado y coordinado, impulsado por la necesidad instintiva de cuidar el espacio donde toda la vida de la colonia ocurre.
Cómo trabajamos el propóleo en Mishkihue: proceso transparente y cuidadoso
En Mishkihue, transformamos el propóleo de manera responsable para mantener su pureza y respetar su origen. Cada paso se realiza con criterio técnico y con el mismo estándar que aplicaríamos a un producto para nuestras propias familias.
- 1. Recolección con mallas y rejillas especiales: Las colmenas se equipan con mallas que permiten obtener propóleo limpio, sin alterar el comportamiento natural de las abejas.
- 2. Selección y limpieza manual: Retiramos restos de madera, partículas grandes y cera para asegurar que el extracto final mantenga su calidad.
- 3. Maceración hidroalcohólica: El propóleo se sumerge en una solución de calidad alimentaria por un tiempo específico. Este proceso extrae los compuestos activos sin quemarlos ni perder sus propiedades.
- 4. Filtrado fino y estabilización: La mezcla se filtra cuidadosamente hasta obtener una tintura pura, limpia y de color homogéneo.
- 5. Producción de formatos: En la cooperativa elaboramos diferentes productos según su uso:
- Sprays
- Gotas
- Cremas
- Jabones
- Sérums
- Mezclas funcionales
Cada producto mantiene la esencia del propóleo: ser útil, natural y honesto.
Usos prácticos del propóleo en la vida diaria
Propóleo en Spray
Ideal para la garganta, temporada de invierno, trabajos al aire libre o exposiciones prolongadas al frío.
Propóleo en Gotas
Puede usarse directamente bajo la lengua, diluido en agua o mezclado en infusiones tibias.
Propóleo tópico (cremas o bálsamos)
Para pequeñas heridas, granos, picaduras de insectos o irritaciones de la piel.
Jabones y cosmética funcional
Aporta protección, suavidad y propiedades desinfectantes naturales.
Cómo reconocer un propóleo de calidad
Un buen propóleo debería ser:
- De color ámbar oscuro o marrón rojizo
- De sabor fuerte, resinoso y natural
- Sin sedimentos excesivos
- Sin mezclas innecesarias
- Con concentración declarada
- Transparente sobre su origen
En Mishkihue, todo el propóleo proviene de apiarios locales y se procesa en condiciones limpias, con dedicación artesanal y criterios técnicos.
Por qué el propóleo Mishkihue es diferente
- ✔ Proceso claro, honesto y sin atajos
- ✔ Materia prima local del sur de Chile
- ✔ Trabajo cooperativo y sostenible
- ✔ Extracción respetuosa, sin calor excesivo
- ✔ Productos con concentración real y efectiva
- ✔ Compromiso con la salud de las personas y la colmena
Nuestro enfoque siempre será acercar productos verdaderos, útiles y hechos con cuidado, siguiendo el mismo principio que guía nuestra apicultura: trabajar con responsabilidad y respetar la naturaleza de la abeja.
Un aliado que nace desde la sabiduría de las abejas
El propóleo es mucho más que un suplemento. Es una muestra del equilibrio natural de la colmena y un ejemplo de cómo la apicultura puede aportar bienestar real a las personas.
En Mishkihue creemos que conocimiento, práctica y honestidad son la mejor manera de compartir este producto con nuestra comunidad.
